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Ahora que lo masculino es más femenino que nunca, toda mujer debería tener en su haber un traje de chaqueta negro, una camisa blanca y un par de señores zapatos del mismo género.
Now that men's style is more feminine than ever, every woman should have in her closet a black suit, a white shirt and a pair of boyish shoes. But when winter comes our feet need to be covered with socks than far from break the outfit give it colour and personality. For this purpose are
Happy Socks
, a swedish brand I'm in love with.
Un look perfecto sin medias, ni calcetines, mientras las temperaturas otoñales aguanten. Pero, ¿qué pasa cuando llegue el verdadero frio? Que seamos sinceras, salvo a las heroínas que hacen street style, los pies y pantorrillas del resto de los mortales se quedan tan fríos que bien agradecen ser cubiertos. Eso sí, no a cualquier precio. No valen ni calcetines, ni medias feas y menos enfundarse unos tristes ejecutivos que se cargen la personalidad del look. ¿Entonces? La respuesta para mí es
Happy Socks
. La marca sueca que ha revolucionado el mundo calcetinil y mi cajón (desde que los descubrí hace ya varios años) apostando por diseños originales y con la mejor calidad en calcetines que conozco. Son de algodón, están retamados a mano y se ajustan tan bien al pie que es un gustazo llevarlos. Además, desde que los uso, el mundo paralelo de los calcetines perdidos ha cambiado porque, con tan coloridos diseños, enontrarlos y emparejarlos después de la colada es mucho más fácil. Esta temporada a mi cajón han llegado cuatro prints:
animal, floral, rayas y cashmere. Para con ellos, además de ir calentinta, colorear mis looks masculinos durante los oscuros días de invierno.
Happy Socks Day!
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