Fotografía de Fernando Mañas |
La sigo desde que llegó a la blogosfera y ya ha llovido. La admiro desde que la conozco personalmente porque es buena gente y graciosa como pocos artistas. Pertenezco a su ejército de chaquetas militares desde que sacó la primera colección. He ido a (casi) todas sus presentaciones a sabiendas de la ansiedad que me provoca 'quererlas y no poderlas'. Os he hablado de ella varias veces
aquí
y
aquí
, y vendrán más. Soy fan de la mujer y de la profesional. Se llama Marina Conde y es dueña y señora de la marca
La Condesa
. Marca que la noche del pasado 12 de febrero se estrenó sobre la pasarela en la
Seagram's Gin MFSHOW
de la mano de
Philips
y nos dejó, a todos los allí presentes, con la boca abierta.
Fue LA noche. Madrid se vistió de rock y glam para ver Cornucopia: el cuerno de la abundancia, una oda al exceso y la alegría para la que Marina se inspiró en una serie de esqueletos completamente cubiertos de joyas: oro, perlas y piedras preciosas encontrados en varias iglesias de la Europa Medieval.
Capas, smokings, abrigos, chaquetas, vestidos, chalecos, faldas... no le falta de nada a esta colección que, lejos de transmitir el exceso por el exceso, presentó muchas de sus piezas en un estilo de lo más casual al compartir protagonismo con sneakers, jeans y gorras de béisbol. Incluso sus engalonadas chaquetas se lucieron anudadas a la cintura. ¿Con qué me quedaría? Con todo, con absolutamente todo. Pero como en esta vida siempre hay que elegir, a continuación os muestro mis diseños favoritos. No son las mejores fotos del mundo, lo sé. En vivo y en directo no sabéis lo que ganan, pero son mis fotos, las que me recordarán que yo estuve en el primer desfile de La Condesa cuando llegue el día en el que en su imperio no se ponga el sol. Porque, amigos, esta mujer va a dar mucha guerra y si no, al tiempo.
P.D.: Como pudisteis comprobar los que me seguís en Twitter (@TapiaNoelia), no comenté el desfile porque no me quise perder ni un solo detalle. Pero sí dije algo cuando terminó y quiero repetirlo aquí: ¡BRAVO Marina! no solo la colección es la caña, sino que además la gente te quiere.